Bruno fue un ejemplo de empleado. Hace dos años que es soldador en una empresa de prefabricados de hormigón, de camino a Sidrolândia, regresaba del trabajo cuando ocurrió el accidente, a pocos metros de su casa.
Es recordado como un ejemplo de empleado y uno de los mejores de la empresa, según detalló el jefe de la víctima, Tiago Augusto Brandão Cardoso, director ejecutivo, de 32 años. Según Tiago, Bruno era reservado y muy profesional. “Era sistemático, muy responsable. No tengo nada de qué quejarme, un gran profesional, nunca se ausentaba ni llegaba tarde y creció mucho en la empresa. Se dedicaba a aprender. Incluso estábamos hablando de que en dos o tres años sería uno de los mejores en el montaje de la zona», recordó.
Muy educado, Bruno siempre agradecía el salario y celebraba cuando había un aumento en la producción, ya que le pagarían mejor y en consecuencia podría darle más cosas a sus hijos, que siempre pasaban los fines de semana con él.
Tiago todavía refutó la primera información que Bruno había intentado adelantar. “Tenía un shineray de 50 cilindros. No era para adelantar. Era como una bicicleta, hasta caminaba por el costado de la vía porque la moto no andaba. El tipo, que estaba borracho, se golpeó la parte trasera de su moto, nos habló el propio perito», informó.
El velorio de Bruno tendrá lugar a partir de las 16 horas de este miércoles (24) y el cuerpo será sepultado a las 9:30 horas de este jueves (25) en el Cementerio del Parque Memorial.
Accidente
El accidente ocurrió en el Km-363 de la carretera alrededor de las 6 de la tarde, cuando el conductor que viajaba en un Peugeot terminó atropellando al motociclista quien sufrió fracturas en ambas piernas, abrasiones en la cabeza y espalda siendo arrastrado 97 metros por el auto.
El automóvil y la motocicleta se dirigían a Indubrasil, la región donde vivía la víctima. La pista fue parcialmente prohibida por la PRF (Policía Federal de Carreteras).
El conductor del auto se dio a la fuga a pie y fue perseguido y detenido in fraganti por la PRF. La prueba del alcoholímetro indicó que conducía en estado de ebriedad. Lo llevaron a la comisaría.
Un pasajero que acompañaba al conductor del automóvil se quedó en el lugar del accidente en estado de shock. No pudo hablar con los bomberos y se negó a recibir atención médica. La parte delantera del automóvil quedó completamente destruida y la ventana del conductor se rompió.